Lucas 8:24-25
Los discípulos fueron a despertarlo y le dijeron: «¡Maestro, Maestro, nos vamos a ahogar!». Jesús se levantó y reprendió al viento y a las aguas embravecidas; la tormenta se calmó y todo quedó en calma. «¿Dónde está vuestra fe?», preguntó a sus discípulos. Con miedo y asombro, se preguntaban unos a otros: «¿Quién es éste? Manda hasta a los vientos y a las aguas, y le obedecen».